¿Cómo reconocer una serpiente venenosa?
Una breve explicación con datos curiosos.
CONOCIENDO MÁS A LAS SERPIENTES
Son unos de los animales menos comprendidos por el hombre e instintivamente nos provoca terror el simple hecho de pensar que podemos encontrarnos con una mientras estamos en la naturaleza.
No seas de los que ve una serpiente y lo primero que hace es buscar la forma de matarla. De hecho esto es lo más peligroso, ya que si la molestas, instintivamente va a defenderse. La mejor solución es evitarlas o de no ser posible llamar a la policía ambiental.
¿Por qué no debemos matar a las serpientes?
Las serpientes son saludables dentro del ecosistema, se encargan de controlar la población de roedores y así evitan que se conviertan en plaga. Dentro de la cadena alimenticia son un eslabón más y también tienen depredadores que se alimentan de ellas, como por ejemplo, coyotes, aves de presa, zorros, etc.
En Argentina habitan unas 134 especies de serpientes, la mayoría de ellas son inofensivas para el hombre, y sólo 17 especies poseen sistemas para inocular venenos.
¿Para qué tienen los venenos las serpientes?
Su principal función es la de capturar sus presas, ya que los ofidios se alimentan con animales relativamente grandes respecto a su masa corporal. El veneno tiene también función digestiva además de tóxica. También le sirve para defensa de posibles predadores o agresores (dentro de esta categoría se encuentra el hombre).
CUÁLES SON LAS SERPIENTES
Se han definido cuatro grupos de serpientes:
AGLIFAS: no poseen dientes modificados para inyectar veneno. Sí poseen dientes normales en la mandíbula superior. Son inofensivas, incluyen a la mayoría de las culebras, las boas, y las serpientes ciegas.
OPISTOGLIFAS: tienen uno o dos dientes agrandados (con surcos) en la parte posterior de la boca y están relacionados con glándulas venenosas. Incluye algunas culebras, y debido a la poca eficiencia de su sistema de inyección producen pocos accidentes siendo consideradas poco peligrosas.
PROTEROGLIFAS: son las Corales, tienen un diente agrandado adelante, con un surco y conectado a una glándula de veneno, el diente no es tan móvil. SON POTENCIALMENTE MUY PELIGROSAS por sus venenos fuertemente neurotóxicos.
SOLENOGLIFAS: son las Yarará y Cascabeles, que tienen dos grandes colmillos móviles con un orificio interior para inocular veneno a la manera de una aguja hipodérmica. Las Yararás provocan la mayor parte de los accidentes ofídicos en Argentina. Los accidentes por Corales son muy raros (uno por mil de los casos). Los envenenamientos producidos por Corales y Cascabeles son generalmente más graves.
¿CÓMO DIFERENCIAR A LAS SERPIENTES VENENOSAS?
Para prevenir y tratar accidentes ofídicos es fundamental conocer a las serpientes venenosas, y por lo menos determinar si se trata de una Coral, una Yarará, o una Cascabel.
La acción de los venenos, la gravedad del accidente y el suero antiofídico que se debe aplicar ante un accidente ofídico con síntomas, debe ser específico (un tipo de suero para cada tipo de serpiente).
CORAL O FALSA CORAL
EJEMPLOS
YARARÁ O FALSA YARARÁ
¿QUÉ HACEMOS UNA VEZ QUE OCURRIÓ UN ACCIDENTE OFÍDICO?
Se debe tener en claro que la curación debe estar en manos de un médico capacitado, y que el único tratamiento eficaz es una rápida y correcta aplicación del suero antiofídico específico, por lo que se debe trasladar al paciente lo más rápido posible a una unidad asistencial, y avisar por radio o teléfono, si es posible, sobre las características del accidente.
QUÉ SE DEBE HACER:
Tranquilizar al paciente y a las personas que lo rodean. Muchas personas creen que la mordedura de una serpiente lleva a una muerte inevitable. La mayoría de los accidentes en Argentina son provocados por Yararás, y sus especies producen un bajo porcentaje de mortalidad, existe el tiempo suficiente para aplicar el tratamiento efectivo.
Inmovilizar el miembro mordido, y al paciente. La contracción muscular promueve la absorción del veneno a través de los canales linfáticos y acelera la circulación. Si es posible, que no efectúe ningún esfuerzo físico.
Quitar anillos, brazaletes y la ropa que contenga el sitio de la mordida, ya que la inflamación puede agravarse por estos elementos.
EVITAR intentar matar al ofidio que ha mordido a la persona, ya que puede ocasionar nuevos accidentes. Esto no es indispensable para un tratamiento correcto.
Darle al paciente abundante agua y mantenerlo si es posible en un lugar fresco y cómodo.
La obstrucción respiratoria es un síntoma posible con Corales y Cascabeles (neurotóxicas) por parálisis de la mandíbula o lengua. Si ocurre paro respiratiorio o cardíaco aplicar técnicas estandarizadas de resucitación cardiorespiratoria (RCP).
QUÉ NO SE DEBE HACER:
Evitar procedimientos dañinos y contraindicados. La succión no es recomendada por aumentar el edema y no ser efectiva, la aplicación de hielo puede agravar la necrosis.
La ingesta de alcohol puede agravar el efecto del veneno sobre los riñones e hígado.
Evitar la ingesta de aspirina o colocación de inyecciones intramusculares con calmantes. La aspirina aumenta las posibilidades de hemorragias y potencia la acción anticoagulatoria de algunos venenos. Las inyecciones pueden provocar grandes hematomas.
Evitar torniquetes y ligaduras, ya que esto puede agravar los efectos del accidente ofídico.